Profundizándo en los Mandalas en la naturaleza, una de las series más interesantes por su significado es la de los Mandalas de los Elementos.
Los elementos se pueden definir como los arquetipos que tienen su efecto e influencia en nuestro ser, nuestra consciencia y nuestra forma de entender el mundo. No deben interpretarse en su sentido puramente material, sino conceptual, ya que constituyen la síntesis de todas las manifestaciones físicas, y psíquicas de cada ser.
La teoría de los cuatro elementos es muy antigua (por ejemplo, en china se desarrolló en el segundo milenio antes de Cristo) y se originó desde la observación de la naturaleza.
Observaron que se podía hacer un ciclo de creación o destrucción, con los cuatro elementos de la materia básica, de las cuales las personas dependemos, para poder sobrevivir:
- el aire para respirar
- el agua para beber
- el fuego para calentarse
- la tierra para comer.
Si alguna de esas cuatro falta, el equilibrio y el ciclo se rompen dando lugar a la enfermedad y la muerte. Posteriormente, a los elementos se asignaron propiedades espirituales, mágicas, religiosas y curativas.
El concepto clásico de los cuatro elementos, como lo definieron los presocráticos, representa aspectos de nuestra naturaleza interna.
- La tierra simboliza el ser material, el soporte, lo estable, la consolidación.
- El aire significa la mente, lo expandible, lo sutil, el poder creador del pensamiento.
- El agua representa la adaptabilidad, la fluidez, el fluir de las emociones.
- El fuego es energía, vitalidad, inspiración y transformación.
Todavía en la Grecia clásica, Aristóteles agregó un quinto elemento que no era terrenal ni corruptible, era celestial: el éter. Los budistas tienen también el elemento éter asociado al reino espiritual.
En oposición a la noción occidental que los relaciona con las diferentes manifestaciones de la materia, los chinos distinguen estos elementos de una manera ligeramente diferente: tierra, agua, fuego, metal y madera. En la medicina china tradicional son entendidos como diferentes tipos de energía en un estado de constante interacción y flujo entre ellos.
En los próximos días publicaré algunas de mis obra sobre los cuatro elementos clásicos. Si estás interesado en poseer una obra original o una reproducción, házmelo saber desde el formulario de contacto.